La Psiconeuroinmunología (PNI) se mueve armoniosamente en dos terrenos, por un lado mira hacia adentro al nivel más detallado de la química del cuerpo y al mismo tiempo mira hacia fuera en los ámbitos más generales de las emociones y la salud.
Para lograr esta mirada integrativa, hace uso de diferentes tipos de tecnología de última generación, que le sirven para analizar las moléculas y los genes en sus más mínimos detalles, e incluso para simular el funcionamiento de órganos completos como el cerebro.
Esta disciplina científica sirve de enlace entre diferentes disciplinas de las ciencias básicas tales como la inmunología, la neurobiología, endocrinología, y hace el puente con campos especializados de la medicina tales como la psiquiatría y la reumatología. También conecta a las ciencias básicas con la medicina clínica, y ambas con la psicología; particularmente con esos aspectos intangibles pero de esencial contribución para la comprensión del ser humano, como son los sentimientos y las emociones.
Probablemente era necesario pasar por el ejercicio de una alta especialización, desde el tiempo de Descartes y Bacon hasta la mitad del siglo pasado, para obtener el nivel de entendimiento detallado del organismo que tenemos hoy en día. Sin embargo, lo que está resultando es que cada disciplina está tan abrumada con los detalles, que pareciera que el todo se perdió en esas partes, en lo que al dominio de la salud se refiere.
La Psiconeuroinmunología está retomando el camino de la integración y está desmontando las barreras que se derivan del incremento exagerado en la especialización y su consecuente arrogancia, que no es otra cosa que el miedo a la ignorancia en el campo del otro.
El objetivo final de esta ciencia no es otro que reconstruir la psique y el cuerpo completos de nuevo, donde el espíritu no quede excluido. Implica retomar la conexión y el significado de quienes somos realmente, como seres humanos totales, lo cual redunda en el redescubrimiento de todo nuestro potencial físico, afectivo, intelectual y trascendental.