Desde hace relativamente pocos años se viene desarrollando una nueva disciplina científica denominada Psiconeuroinmunología (PNI). Este campo del conocimiento explora las interconexiones, puestas en evidencia a través de diversos estudios, entre los sistemas nervioso, inmunológico y endocrino.
Tanto el sistema inmunológico como los sistemas cardiovascular y nervioso han sido estudiados en forma aislada e incluso como sistemas autónomos, y es recientemente con los avances de la medicina experimental, que se ha tendido hacia la integración en el estudio de dichos sistemas. Especialmente, a partir de la descripción de los efectos del estrés sobre la inmunidad o la capacidad de respuesta defensiva del organismo ante los ataques de virus, hongos o bacterias.
Hoy en día es conocido que el sistema nervioso central desempeña un significativo papel en la regulación del sistema inmunológico (SI) y existe una reciprocidad en el control del cerebro por parte del sistema inmune.
La Psiconeuroinmunología ha planteado el desafío de tratar la mente y el cuerpo como una unidad en la cual es posible estimular la denominada farmacología humana, para de esta manera influir en el sistema inmunológico y en los mecanismos que permiten afrontar la condición de enfermedad; pudiendo hacer posible desde una mejor calidad de vida hasta la sanación.
Los estudios sobre el efecto del estrés sobre el sistema inmune han permitido el conocimiento de la compleja interacción entre los sistemas nervioso, endocrino e inmunológico. Un evento estresante de orden físico, ambiental o emocional induce una respuesta fisiológica alterada, básicamente por los altos niveles de la hormona corticotropina y el cortisol, lo cual tiende a afectar la funcionalidad del sistema inmune y/o crear la percepción en el individuo de ver menoscabada su capacidad de afrontar ese evento; así como, potenciar la vulnerabilidad a una serie de enfermedades de alto riesgo, tales como cáncer, enfermedades autoinmunes y diversas alteraciones endocrinas.
La Psiconeuroinmunología plantea diversos desafíos, por una parte a los individuos que buscan la verdad en los avances del conocimiento científico y por otra, a aquellas personas que la buscan desde su experiencia existencial.
La salud y la enfermedad con los conocimientos que nos aporta la Psiconeuroinmunología, ya no pueden ser vistas con aquella lógica reduccionista y mecanicista, que consideraba al cuerpo como una máquina, a la enfermedad como averías de la máquina, a la intervención del médico o los profesionales de la salud como los reparadores de la máquina y la salud como la ausencia de averías o enfermedades.
Los avances del conocimiento científico han ido, paulatinamente configurando una racionalidad científica más integradora, que incluye la dialéctica de los fenómenos a conocer y la red de relaciones que se generan entre ellos. Diversas disciplinas científicas han debido buscar el terreno común sobre el cual es posible construir una perspectiva nueva de la salud y la enfermedad, y en esencia de la existencia humana, dando lugar a un enfoque transdisciplinario.
La Psiconeuroinmunología lleva a considerar la salud como un camino que se puede elegir y la enfermedad como una equivocación que es posible enmendar de algunas formas. Esto representa diversas repercusiones no suficientemente exploradas para la prevención y cuidados de la salud, y ha señalado rumbos esperanzadores a quienes han enfermado.
Bienvenidos y bienvenidas al Curso Introductorio de Inmunoalfabetización
Te recibo con mi amoroso inmunoabrazo de bienvenida, con mi agradecimiento infinito y mis deseos porque este curso introductorio signifique un punto de inflexión positivo en tu vida, en un área tan importante para los seres humanos cómo es la salud. Gracias por haber confiado en nosotros, por permitirnos acompañarte y apoyarte.
Para celebrar nuestro primer aniversario, hemos creado este curso Introductorio de Inmunoalfabetización, el cual contiene la información básica que necesitas para que puedas adueñarte de tu sistema inmunológico. A lo largo de este año, muchas personas nos han comentado que les gustaría comenzar su contacto con la Psiconeuroimunología a través de un curso corto, que les permita apropiarse de este conocimiento e Inmunoalfabetizarse. Además, deseamos hacer del Movimiento de Inmunoalfabetización (MIA) un proceso de aprendizaje continuo, del cual este curso introductorio es el primer paso.
No podemos ignorar que estamos atravesando un momento único, inesperado y sumamente difícil para la humanidad, que toca el ámbito de la salud no solo la física, sino también la emocional, psicológica y espiritual y que gracias a la tecnología estamos conociendo y viviendo sus incidencias planetarias en tiempo real. Nunca antes había ocurrido algo así. La pandemia del Sars Cov-2 es un evento extraordinario, que exige medidas extraordinarias. Creemos que el Movimiento de Inmunoalfabetización, del cual formas parte desde este instante, tiene mucho que aportar.
Ahora, compartiremos contigo algunas noticias y recomendaciones pertinentes.
Me complace informarte que personas de 27 distintos países ya han realizado el Curso de Inmunoalfabetización : Panamá, Ecuador, Colombia, Argentina, Venezuela, Chile, Uruguay, Costa Rica, México, USA, Canadá, España, Suiza, Italia, Reino Unido, Francia, Honduras, Alemania, Malasia, Trinidad y Tobago, Israel, Perú, El Salvador, Australia, Bélgica, Arabia Saudita y Singapur.
Gracias a todos nuestros inmunoalfabetizadores por haber convertido nuestros sueños en realidad.
Para aquellos que no han realizado la Prueba de Personalidad Inmunocompetente les pedimos que la hagan hoy mismo. Para tomarla deben ir al siguiente enlace https://miaevolution.com/prueba-inmunocompetencia/. Los resultados les llegarán en cinco minutos a su dirección de correo electrónico.
Sacarás el mayor provecho de nuestro Curso Virtual Introductorio de Inmunoalfabetización, llevando a cabo todas tus tareas y asignaciones, las cuales te iremos informando a medida de que avances en el curso.
Estás listo(a) para comenzar esta aventura inmunológica, cómo siempre mi inmunoabrazo agradecido.
Marianela Castés